Luminarias con flores
- Pedro Leónidas Cárdenas Fonseca
- 22 oct 2021
- 2 Min. de lectura
Actualizado: 24 oct 2021
Varios artesanos de casillas y luminarias de los Municipios de “Pachavita”, “Garagoa”, “La Capilla”, “Chinavita” y “Tenza”, cuentan que, “en otros tiempos los padres y abuelos presentaban estas obras con flores naturales de diferentes clases. Entre ellas la clavellina, las variedades de orquídeas regionales y los buganviles”. De ellas, la que más se empleó y aún utilizan algunos campesinos artesanos, es la clavellina, en Pachavita y Garagoa, según lo afirma don José Misael Ramírez, cultor de esta tradición, de 75 años, residente en Pachavita.

Luminrias con flores. Foto: Danna Hernandez
En este lugar y en Garagoa, la clavellina fue la flor que más se empleó; en Chinavita los buganviles y en Tenza las orquídeas, algunas de ellas se encuentran en los parques de esos municipios, en los balcones y jardines interiores y antejardines de sus casas rurales y urbanas y en los senderos naturales.
Algunas pequeñas luminarias, casillas y “carrosas carretilla”, solían adornarse con otras flores silvestres, como rosas, azucenas, lirios, geranios, novios, heliconias, hortensias y claveles. Antes, los desfiles se apreciaban como exposiciones florales, como florilegios naturales, precisamente, según lo contó en 1992 don Antonio Pulido, de ahí nació la Feria de las flores de Chinavita, que se realiza en diciembre y se reafirma en sus Ferias y fiestas, el 30 y 31 de diciembre y los tres primeros días de enero.
Ahora, los artesanos hacen flores con papel periódico, seda y silueta, así como con cartón, fique, foammy, calceta, amero de maíz, semillas, latas de cerveza, botellas plásticas y con maderas blandas. Sus flores las emplean para engalanar sus luminarias y como parte fundamental de sus propuestas alegóricas y simbólicas. Las ubican en arcos, portadas, pesebres, vértices, columnas, pabellones, etc. O, simplemente, las pintan para recrear los pasajes de sus composiciones.












